Los rayos UV (uv rays) son los rayos ultravioleta, los que penetran en la atmósfera y afectan a la piel. No todas las pieles se ven afectadas de la misma manera por los rayos del sol, puesto que hay seis fototipos distintos de pieles (en función del color de piel, del pelo, de las pecas…). El proceso de bronceado de la piel es un mecanismo de adaptación, de defensa de esta ante la agresión que representa el sol, pero no es de ninguna manera un escudo impenetrable. El hecho de tener la piel bronceada a menudo protege de las quemaduras, pero no por ello se deben tener exposiciones inmoderadas, ya que los efectos a largo plazo pueden ser muy perjudiciales.

Recuerda que la protección solar tiene una duración determinada que, en casos de factor de protección alto suele ser cerca de las dos horas, de manera que es necesario repetir la acción de protegerse de manera continuada contra los uv rays.